Recuerdos nostálgicos jugando y trabajando con un uslero cuando tenía apenas seis años son los que afloran en María Beatriz para contarnos de su vida, cuando en largas tardes junto a su abuela Zenobia, dueña del restoran El Arbolito, en Larmahue, pasaba gran parte de su infancia aprendiendo los secretos de la cocina y la preparación de los alimentos. Su origen es de pura cepa larmahuina ya que sus raíces la vinculan además con el azudero declarado Tesoro Humano Vivo, don José Huerta. El cariño por la tierra, el valor de la naturaleza y el respeto a su propia historia la llevaron junto a su pareja César Doenitz a incursionar en la producción de una deliciosa creación de patés vegetales, mermeladas y productos gourmet, con frutos de su propia huerta, manteniendo procesos artesanales tradicionales, a baja escala y recurriendo a los productos locales como protagonistas de su gran creación.
El sello que nos distingue es nuestro cuidado y preocupación por elaborar nuestros productos cien por ciento artesanales y naturales. Incorporamos en ellas toda la bondad y beneficios de los frutos que recolectamos con sumo cuidado junto a nuestra familia y amigos del campo. Nuestras canastas se van llenado de las mejores cerezas, naranjas, peras, ciruelas, uvas, manzanas, alcachofas, espárragos hasta los mas dulces y aromáticos tomates de nuestra comuna.
Vamos poniendo nuestra huella de innovación en nuestra línea gourmet, queremos que la gente pruebe productos que refuercen y complementen sus comidas y aperitivos con sabores que sean una experiencia sublime al paladar y que sorprendan con la calidad de éstos al compartir momentos. Acá se destacan nuestros ajíes, mostazas a la miel, con merkén o cilantro y confituras de ají, pimientos y cebollas, nuestros patés vegetales entre muchas creaciones más.
El campo nos regala increíbles sabores durante las estaciones del año, cuando las frutas están en su punto, comenzamos con la recolección de forma manual. Durante el año cosechamos naranjas, moras silvestres, nísperos, ciruelas, kumquat y granadas donde nuestra amiga Patricia. Al finalizar el verano cosechamos las últimas sandías y melones, y esperamos los membrillos e higos de las añosas higueras de nuestra amiga y vecina Claudia.
Somos de Larmahue y lo reconocemos con orgullo. Nuestra marca con identidad local lleva las azudas, motor de la agricultura campesina de Larmahue. Son las azudas, las que al abrir sus compuertas permiten que comience un nuevo ciclo, el agua entra y recorre la tierra, invitando al surgimiento de la vida, regando los cultivos, frutales y toda plantación que maravillosamente crece en nuestro rico Valle de Almahue desde tiempos ancestrales.
El secreto de una mermelada está en la paciencia y cariño, el fuego hace lo suyo, siempre lento, nunca apurando, revolviendo con la tradicional cuchara de palo. La fruta y el azúcar se fusionan con las especias: canela, clavo de olor y nuez moscada perfuman cada rincón de nuestro espacio, el brillo y textura que va tomando es señal que falta poco “está en su punto”, luego a envasar y así conservar los sabores, aromas y colores de nuestros frutos.
Nuestro local
Ubicado en el corazón de la comuna de Pichidegua y rodeado de naturaleza podrán encontrar nuestro local y conocer nuestra gran variedad de productos.